Muchas personas consideran a la hidroponía un método de cultivo que nos permite la calidad y la cantidad de producción y además sin provocar daño alguno al medio ambiente. Por ello es que se puede hacer un cultivo hidropónico de cerezas de forma natural y muy sencilla. El cerezo es originario del Oeste de Asia y el Sureste Europeo, el que fue difundiéndose por todo el mundo a través del hombre y las migraciones de los pájaros. Además fue uno de los frutos predilectos tanto de los griegos como de los romanos, por su gran sabor dulce y un poco acido. Para comenzar a hacer el cultivo hidropónico de cerezas deberemos tener todos los materiales. Estos son las semillas o brotes de cerezo, una maceta hidropónica, un sustrato, la solución de nutrientes y minerales y un sitio donde colocarlo.
Lo primero que tenemos que hacer antes de empezar el cultivo hidropónico de cerezas es hacer la estratificación de las semillas. Esto lo haremos colocando todas las semillas en un frasco o recipiente y las taparemos con una mezcla de turba y arena. La humedeceremos un poco y la colocaremos en la heladera o refrigerador a una temperatura entre 1° y 6° centígrados por un tiempo aproximado entre seis y ocho semanas. Luego de ese tiempo seguramente tendrás el brote de cerezo. El siguiente paso en el cultivo hidropónico de cerezas es colocar este brote en la maceta hidropónica. Taparla con el sustrato tipo perlita y mantenerla humedecida con la solución de minerales y nutrientes las primeras semanas, hasta que la planta se desarrolle un poco.