Es importante que tengas en cuenta que al igual que el potasio y el nitrógeno, el fosforo es un elemento fundamental para el desarrollo de las plantas, y si bien hay muchos fertilizantes químicos que lo poseen en su contenido, hay también diferentes maneras de aportar fósforo para plantas. La manera casera de hacerlo, es utilizando los cerillos que usas diariamente; la idea es que juntes una buena cantidad de ellos y los mojes para luego insertarlos boca abajo, es decir con la cabeza del fosforo dentro de la tierra, y alrededor de la planta a la que le deseas reforzar este elemento.
Lógicamente, los cerillos tienen un altísimo contenido de fósforo y al mojarlos, ayudas a que sea mucho más fácil para la planta absorberlo. Este pequeño truquito casero es ideal para cultivos frutales o herbáceos ya que son estas las especies que más necesitan fósforo, pero de todas maneras si esto no alcanzase, sería bueno que te asegures de usar fertilizantes que tengan todos los componentes necesarios para que tus plantas crezcan y se desarrollen sin problemas,