Antes de hablarte sobre el cultivo hidropónico de sandia haremos un breve repaso de su origen, historia y características principales. La sandia, aguamelón, melón de agua o patilla como también se la conoce, es básicamente una hierba de la familia de las trepadoras. Esta es originaria del continente africano, pero es muy común en Asia y de allí se fue propagando por todo el mundo. Su fruto es lo más preciado de esta planta, este contiene un alto grado de agua y es muy suave, refrescante y de un sabor muy rico. Aunque el cultivo hidropónico de sandia no sea muy popular por el gran tamaño de su fruto no es imposible hacerlo, ya que las sandias hidropónicas tienen un mejor y más concentrado sabor y un tamaño más grande que las cultivadas en tierra. Para la siembra, cultivo y un mejor desarrollo de esta hierba trepadora es aconsejable que el clima sea entre 20° y 28° como máximo.
Dentro de las ventajas del cultivo hidropónico de sandia debemos decir que con este método no será necesario usar ni pesticidas ni agroquímicos ya que ni los parásitos, hongos ni plagas lo afectaran y es por ello que se lo considera un cultivo ecológico. Además reciclaremos el agua y los nutrientes por lo que no derrocharemos tampoco agua. En la hidroponía las frutas y verduras crecerán más rápido y con más tamaño, por lo que podrás hacer más de una cosecha al año con muchos vegetales. Otra de las ventajas del cultivo hidropónico de sandia es que podrás hacerlo en cualquier sitio de tu hogar, solo necesitaras un espacio libre de por lo menos un metro cuadrado, ya sea en una casa o un apartamento.