Si tenemos un jardín seguramente hemos experimentado en carne propia lo que significa tener una plaga de insectos en el. Dentro de esas plagas que atacan a nuestras plantas están las cochinillas, estas según el país o región se las llama de diferentes maneras, conchuelas, caspillas, chanchitos, cócidos, etc. Estos insectos se caracterizan por tener una coraza protectora que según la especie será de diferente color y consistencia. Podemos asegurarte que las cochinillas junto con los pulgones es una de las plagas más frecuentes del jardín. Una de las características de esta plaga es que puede atacar a casi cualquier árbol y planta. Se alimentan de la savia de las plantas y árboles mediante un pico succionador, pueden atacar tanto a las hojas, los tallos y los frutos. Las excreciones de las cochinillas son como un líquido azucarado que se lo llama comúnmente melaza. Pueden tener más de una generación por año dependiendo del clima, por lo que rápidamente puede transformarse en plaga. Existen diferentes maneras de detectarlas en nuestro jardín, una y la más habitual es mirándolas en la planta.
Otra de las maneras es buscando hojas amarillas, descoloridas o deformadas, un síntoma clásico de la aparición de cochinillas. Otra de las maneras es buscando hojas brillosas por la melaza o cuando aparece el hongo negrilla o fumagina, que se asienta sobre la misma melaza. Generalmente estos insectos producen en las plantas dos tipos de daños, uno de forma directa y otro de forma indirecta. El daño causado de forma indirecta es por el hongo negrilla. Esto debilita a la planta ya que no puede hacer la fotosíntesis. El daño causado de forma directa es cuando succionan la savia de la planta, esta se debilita y pierde vigor. Una manera sencilla de erradicarlas es eliminando las partes afectadas, colocando a la planta en un sitio con mas luz y más fresco también ayuda. Al tener caparazones son difíciles e eliminar ya que muchos insecticidas no llegan a tocarlos, por lo que pasar un algodón con alcohol por las hojas es una buena solución. Una solución más ecológica es conseguir mariquitas, este insecto es uno de sus mayores depredadores.