El grillo topo más conocido como alacrán cebollero es un insecto ortóptero que pertenece a la familia de Gryllotalpidae. Es nativo del continente europeo, el norte de África y oeste de Asia, este fue introducido en América donde se fue extendiendo por todo el continente. El grillo topo es sin dudas uno de los insectos mas inusuales y extraños que existen. Su nombre deriva del latín Gryllus que significa grillo y talpa que significa topo. Se lo llama de esta manera por sus hábitos de enterrarse en la tierra. Los machos hacen pozos tipo cámaras para que su canto sea más fuerte y son muy territoriales y agresivos, mientras que las hembras hacen cuevas para colocar sus huevos, donde los cuidan. El grillo topo está cubierto por una capa de pelo muy fino, son de color marrón y las hembras miden entre 4 y 4 ½ centímetros, mientras que los machos entre 3 ½ y 4 centímetros. Se destacan por sus patas delanteras, estas son muy fuertes y grandes, y son las que les permiten cavar sus cuevas.
El grillo topo se caracteriza por ser un insecto muy destructivo para el jardín, ya que destruye tubérculos, raíces, bulbos. Además destruye la mayoría de los cuellos de las hortalizas como zanahorias, patatas, cebollas, etc. Una manera de detectar al grillo topo es mirando detenidamente el suelo o la tierra, si vemos pequeñas montañitas de tierra sin dudas son estos insectos. Además de los daños que pueden provocar a las plantas también lo hacen con nuestro césped. Por lo que lo mejor es tratar de erradicarlos antes que nos destruyan el jardín. El grillo topo pasa el invierno aletargado y son muy activos en las estaciones de calor. Una técnica casera y natural para atraparlos es mezclar cinco litro de agua con 30 centímetros cúbicos de detergente. Los debes tirar en los agujeritos al lado de los montículos, y esperar unos pocos minutos, cuando salgan los puedes atrapar a mano.