Cuando queremos tener una orquídea en nuestro hogar debemos saber absolutamente todo lo que ellas necesitan. Esto incluye el riego, la iluminación, la humedad, el mantillo o sustrato, el abono y la fijación. La iluminación de orquídeas es vital para que nuestra planta crezca sana y fuerte. Por ello lo mejor es que pongas a esta planta cerca de una ventana bien iluminada, pero debes tener cuidado que no reciba la luz directa del sol. En el caso que la ventana reciba luz directa podremos colocar una cortina fina o un visillo para protegerla del calor, que puede quemar el follaje de la orquídea y suavizar la luz. Como consejo que podemos darte en cuanto a la iluminación de orquídeas es que no coloques a tu planta a más de un metro de la ventana.
Lo más seguro es que no le llegue luz suficiente para hacer la fotosíntesis y posteriormente asimilar los nutrientes. Si recibe poca luz esto lo notaras porque las hojas de la orquídea se volverán de un verde oscuro, tendrá pocas raíces y los racimos de flores serán pobres. Es por ello que la iluminación de orquídeas se vuelve tan importante en estas plantas. Por otro lado si notamos que las hojas de la orquídea tienen manchas amarillas y amarronadas, esto quiere decir que está recibiendo demasiada luz. Un tip que podemos darte para revertir esto es que la zona donde este la orquídea tenga una buena ventilación, esto se hace para disminuir la temperatura. Pero debemos asegurarnos de no crear corrientes de aire, lo haremos abriendo un poco la ventana, colocando una cortina fina o alejar la planta medio metro de esa zona en las horas de más luz.