La begonia es una de las flores más bonitas para tener en el jardín, y si bien existen más de mil especies diferentes, hay tres tipos de diferentes que se clasifican según el tipo de raíz que tengan. Por ejemplo, están las begonias rizomatosas que se caracterizan principalmente por tener un tallo que crece debajo de la tierra horizontalmente; el mismo produce raíces y brotes que salen en la superficie. Una de las bellezas características de estos tipos de begonia es su follaje.
Otro de los tipos de begonia son aquellas que tienen raíces fibrosas y en este caso, la mayoría de las especies con esta característica, se cultivan en interiores y si bien son capaces de soportar la luz del sol directa, son muy vulnerables a las heladas. En este caso, las begonias de este tipo son consideradas perenne.
También podemos mencionar a las begonias tuberosas que son aquellas que se caracterizan por tener tubérculos y por tener las flores más grandes dentro de las especies de begonia. De cualquier modo ten en cuenta que la mayoría de las especies necesitan condiciones similares de ambiente.