Plantas carnivoras raras
Dentro del reino vegetal las plantas carnívoras raras son un grupo diferente, poseen formas extrañas, su alimentación es a base de insectos y tienen estrategias para capturarlos realmente fascinantes. En su mayoría se alimentan de insectos y rara vez de ranitas, pececillos, crías de roedores, gusanos, escorpiones pequeños, reptiles y aves, pero muy raramente. Por este motivo se dejó de llamarlas “plantas insectívoras”, y se las denomino “plantas carnívoras”, debido a que en su alimentación pueden aparecer otros animales además de los insectos. Las plantas carnívoras raras habitan en terrenos pantanosos, turberas, con tierra ácida, suelos muy escasos en Nitrógeno disponible para las raíces, lo que provoca que desarrollen estrategias para atrapar insectos y animales para lograr satisfacer sus necesidades nutritivas.
Podemos observar alrededor de 600 especies de plantas carnívoras raras, repartidas en 14 géneros botánicos, en todo el Planeta Tierra. En los centros de jardinería, viveros o floristerías las plantas más vendidas son la Dionaea muscipula (atrapamoscas), Sarracenia, Nepenthes y Pinguicula. La mayoría de estas plantas son muy exigentes y necesitan un cultivo delicado, otras no tanto y logran adaptarse a la vida dentro del hogar.
Estas plantas tienen una vida corta, y necesitan abundante humedad y agua no caliza. Las plantas carnívoras raras habitan en suelos muy pobres en nutrientes, el sustrato de las macetas debe ser pobre también, ya que en una tierra normal para plantas de interior, sus raíces se quemarían debido a las sales minerales que contiene. El esfagno es el mejor sustrato que le podemos brindar a las plantas carnívoras, este es un musgo en semi-descomposicion, tiene un pH ácido, pobre en nutrientes, aireado, esponjoso y con gran capacidad de retener agua. Se puede emplear solo o mezclado con arena. Por ello es que este tipo de plantas no son conocidas por la mayoría de las personas, ya que si tuviéramos que nombrar alguna de las especies de plantas carnívoras raras solo se nos ocurriría mencionar a la venus atrapa moscas.
¿Cómo se diferencian las plantas carnívoras raras?
Existen 5 tipos de trampas de plantas carnívoras raras: Cepos (Dionaea muscipula), Pelos pegajosos (Drosera), Cucuruchos (Sarracenia), Urna sin tapa (Nepenthes) y Vejiga de succión (Utricularias). Cepos: este tipo de trampas son las que posee la planta carnívora rara más conocida de todas, la Venus Atrapamoscas (Dionaea muscipula). El insecto es atraído por un néctar dulce, se posa en la hoja y al rozar dos cerdas se cierra automáticamente. Estas hojas poseen espinas en sus bordes que impiden el escape de la presa, que adentro esta en constante movimiento, provocando que la planta segregue jugos digestivos para la desintegración del insecto, que puede durar varios días. Pelos pegajosos: aquí podemos observar a la Drosera, que tiene hojas en rosetas pegadas al suelo, que segregan un fluido viscoso con un aroma dulce similar al de la miel. Cuando el insecto se posa en la hoja, queda atrapado entre los pelos pegajosos, luego los tentáculos de esta planta se curvan hacia adentro hasta que se cierran completamente. Este proceso puede llevar de 1 minuto a varias horas, luego pasan 1 o 2 semanas hasta que los tentáculos vuelven a abrirse. Esta planta posee la característica de reconocimiento del alimento o no que se posa en su hoja, ya que si colocamos un grano de arena, sus hojas no se cerrarán.
Cucuruchos: estas trampas poseen un receptáculo donde caen los insectos, y al querer escapar no lo logran debido a unos pelos invertidos (Sarracenia) o porque chocan contra manchas translucidas (Darlingtonia califórnica), similares a posibles salidas para los insectos, y caen agotados al fondo de la trampa, y se ahogan en el líquido digestivo de la planta. Urnas con tapa: en estas trampas, los insectos buscan el néctar, y al hacerlo resbalan por las paredes hasta el fondo que esta lleno de caldo viscoso, allí se ahogan y las enzimas y bacterias los disuelven. Por último existe las Vejigas de succión: este tipo de trampas la tienen las plantas carnívoras acuáticas Utricularias. Las vejigas están bajo agua, poseen hasta 5 milímetros de diámetro y tienen una abertura protegida con pelos. Cuando el animal pequeño, ya sea un insecto acuático o un pececillo, toca las cerdas, la vejiga se dilata y succiona al animal.
Estas son las cinco variedades de trampas de las plantas carnívoras raras, y a continuación veremos cómo se dividen por clima. Las plantas carnívoras raras se pueden dividir en carnívoras de climas tropicales y carnívoras de clima no tropical.
- Carnívoras tropicales: (Nepenthes, Caphalotus, Pinguicula) son difícil de cultivar, ya que necesitan mucha humedad y temperaturas cálidas. Son sitios ideales para ellas los terrarios.
- Carnívora no tropical: (Dionaea, Sarracenia, Drosera) estas plantas habitan al aire libre en zonas donde los inviernos son fríos y pasan por un periodo de letargo en invierno. Son sitios ideales para ellas los jardines acuáticos y pantanos.
Las plantas carnívoras raras necesitan abundante luz, sus trampas nos ofrecen colores más vivos con más luz, como por ejemplo en el caso de la Dionaea, son más rojas. Se recomienda al menos 5 horas de rayos del sol de la mañana, cuando no es tan fuerte. La Drosophyllum es la planta a la cual le gusta más el sol que a las demás. La Nepenthes y Drosera no desean sol directo porque se pueden quemar las trampas. En cuanto a las temperaturas, varían según su origen tropical o no. La Dionea y Sarracenia requieren estar unos meses hibernando, con temperaturas frías inferiores a 5°C. En el caso que no hibernen, en la primavera brotarán débilmente y terminarán falleciendo. La Sarracenia necesita 5 meses hibernando. Por otro lado la Drosera, Nepenthes, Cephalotus, y algunas Pinguiculas son plantas de origen tropical que no aguantan el frío y no pueden estar por debajo de los 5°C. Tampoco aguantan el calor extremo. Esperamos que esta información acerca de las plantas carnívoras raras le haya resultado de ayuda.