Poda de arboles
Hablemos en este informe sobre la forma en que se deben hacer los cortes en la poda de árboles, porque es fundamental que los cortes estén bien hechos, puesto que si se hicieran, aunque sea un solo corte mal, podría ocasionar que el tronco se pudra completa o parcialmente, y las ramas que parecieran estar sanas, pueden llegar a romperse en cualquier momento. Si nos ponemos a pensar, cualquier corte es una herida que se le produce al árbol, él tratará de cicatrizar y cubrir dicha herida, fabricando como un labio cicatrizante para que la madera infectada sea aislada. Es muy importante tener en cuenta que, los cortes tienen que hacerse limpios y sin desgarros, de ese modo el labio cicatrizante se podrá formar adecuadamente, para conseguirlo se deberán utilizar herramientas de corte, pero bien afiladas y hacer el corte en el lugar correcto. El lugar apropiado para hacer los cortes son ni muy lejos del tronco, ni muy pegados a él.
Pues los que están muy alejados dejan un muñón que luego se hace muy difícil la cicatrización y terminan por podrirse. La poda de árboles en las ramas de diámetro grande, para evitar que se produzca un desgarro de la corteza, se recomienda cortarla en dos pasos. Se le hace una incisión en primer lugar, luego se la corta más arriba y al final, el muñón que queda se lo quita sujetándolo.
Una buena forma para cortar las ramas es: cortarlas desde su inserción o de lo contrario desviarlas hacia otra rama que haga de tirasavias (quiere decir que es una rama recta en la zona del ápice, eso tiene como función engordar el tercio primero de la rama que forma el ápice). Si por ejemplo al hacer una poda de árboles, quedara un corte con los bordes irregulares, habrá que perfilar para que pueda salir el labio cicatrizante de mejor manera. Cuando una rama es cortada o tirada, por causa de un viento muy fuerte o una tormenta, lo que conviene hacer es eliminar el material astillado, dejando limpia esa zona poniéndole camblum vivo, para lograr que cierre esa herida del árbol. Cuando se hacen cortes grandes a más de 10 cm. de diámetro, se debe tratar de evitarlos y en caso que no se pudiera hacerlo, se deben alisar y retocar hasta dejarlos perfectos. Si los cortes son superiores a los 5 cm. de diámetro, existen mayores riesgos de pudrición del tronco. El agua que queda retenida en las cavidades y huecos de los troncos, no es necesario quitarla, porque ella evita la formación de hongos. Los expertos en este tema de la poda de árboles, recomiendan que las heridas no sean cubiertas con ninguna pasta a base de fungicidas, ni tampoco con pintura cicatrizante, ni barro (porque lleva microorganismos), ni insecticidas y hormonas, ni ningún derivado de hidrocarburos, pues producen deterioro al árbol y no ayuda a nada. Lo mejor es darle un corte limpio.
¿Cuáles son los métodos de poda de árboles?
Existen distintos tipos de poda de árboles, como por ejemplo la poda de formación, poda de mantenimiento y podas excepcionales. Vamos a detallar en qué consiste cada una. La poda de árboles de formación, es prácticamente imprescindible en los árboles ornamentales. El motivo es que al comprar un árbol, y se lo planta dejándolo crecer sin ninguna poda de ningún tipo, éste árbol crecerá naturalmente con su forma correspondiente a su especie, las ramas se distribuirán de cualquier manera y no adquirirá un aspecto interesante, ni decorativo alguno. Hay tres finalidades por las cuales se hace la poda de árboles de formación. La primera es lograr situar la copa del árbol a una determinada altura del suelo, para que por debajo puedan pasar personas, autos, etc. Tratar de formar una disposición sólida de las ramas y que estén bien distribuidas alrededor del tronco. Hay especies de árboles que se les puede dar formas artificiales, como ser: formas de emparrado, de pirámides, cónicas, talladas, cortina, marquesina, y otras más.
Al hacer este tipo de decorados en los árboles, luego se deberán hacer más adelante, podas de mantenimiento o recortes de ramas sobrantes, más veces que a los de formas naturales. Existen 6 formas típicas de árboles ornamentales: esférica, redondeada, péndula, cónica ancha, columnar ancha y fastigiada. Ahora veamos la poda de árboles de mantenimiento. Cuando el árbol ya creció bien formado, tiene la copa una cierta altura, y está con sus ramas estructurales principales y secundarias como corresponde, se deberán hacer podas de mantenimiento durante toda la vida del árbol. Los árboles ornamentales, necesitarán podas para mantenerlos cada 2 o 3 años; en cambio los frutales se deberá hacer poda de árboles 1 vez por año. La poda de árboles de mantenimiento, es para proporcionarle un repaso de eliminación de elementos que no sirven, por ejemplo, sacar las ramas quebradas, enfermas o muertas. Darle un toque de alisamiento a los muñones que quedaron. Eliminar los rebrotes que suelen salir de la base del suelo o del árbol mismo.
Sacar los chupones, que son ramas que nacen con mucha fuerza y de manera vertical. Sacar ramas que se rozan o entrecruzan. Quitar las ramas que tocan cables eléctricos, de teléfonos o edificios, o aquellas que no permiten el paso de personas o vehículos, o que se pasan al terreno del vecino o si hay un pasillo, entorpecen el paso. O sacar aquellas ramas que tienen riesgo de romperse. Y por último están las podas de árboles excepcionales, se le llama así a las podas rigurosas para poder reducir el volumen de la copa de los árboles.
Existen dos tipos de podas excepcionales. La primera es la técnica de terciado que es cortar todas las ramas dejando aproximadamente un tercio de su longitud. Y la segunda es el desmochado, esta consiste en cortar las ramas al ras del tronco, éste corte es más rudo e injustificado que el terciado. Estas técnicas se están practicando como poda de mantenimiento en forma sistemática y habitual sobre los árboles, pero no son muy aconsejables por los expertos en poda de árboles, por que cualquier poda es una agresión para las plantas, ya que son seres vivos. Y como estos tipos de podas son fuertes y se cortan gran cantidad de ramas y de gruesa dimensión, les producen mayor trauma y a veces se dificulta la cicatrización y cierre, arriesgándose a tener aumentos de pudriciones de los árboles. Y se debe tener en cuenta que, hay algunos árboles que no aguantan ninguna poda fuerte. Todo esto es un breve resumen sobre la poda de árboles, que se deben tener en cuenta para cuando tengamos que hacerlo a algún árbol de nuestra casa, aunque hay mucho más por saber, pero en ese caso cada uno deberá investigar por su cuenta, en libros o en el mismo Internet, donde nos brindan mucha información adicional.