Valvula de riego

Para entender el funcionamiento de las válvulas de riego, siempre se recomienda ayudarse con una imagen de la misma, de esta manera se podrán visualizar los conceptos, y no será tan complejo como pensábamos. En un corte transversal de una válvula de riego vamos a poder ver que hay una cavidad de entrada, también hay un sello en donde se encuentra un resorte, una cámara, y una segunda cavidad, destinada a la salida. Una buena y sencilla forma de poder explicar el funcionamiento de una válvula de riego es haciendo una pequeña comparación, de la válvula y una balanza. Cuando la balanza se encuentre en completo equilibrio, la válvula se va a encontrar cerrada. Y esto va a significar que toda la presión que se encuentra en la cámara de la válvula de riego es exactamente la misma a la que se encuentra en la entrada del objeto.

Para saber esto se debe hacer una perforación, un pequeño orificio entre el espacio de la entrada y la cámara. Para poder abrir la válvula de riego, debemos abrir con el solenoide un pequeño agujero en la cámara, hacia la parte de la salida, para lograr hacer de esta manera una disminución en la presión que se encuentra en la cámara, y lograr abrir el paso de toda el agua.

Y cuando cerramos el agujero, la presión en la cámara va a aumentar, y el paso del agua se va a cerrar por completo, deteniendo su avance. Siempre se recomienda que en las válvula de riego se verifique si el paso de agua se encuentra abierto si el programador se encuentra correctamente conectado, y si esta también programado como corresponde, y por último, debemos estar al tanto de si la válvula de riego se abre manualmente. Estas parecen cosas obvias, pero es muy común, que en la distracción de las personas, pasen de largo. Podemos decir entonces que, la válvula de riego es un accesorio imprescindible en la mayoría de los sistemas de riego, y si tenemos algún problema con esta la tendremos que cambiar o arreglarla.

¿Cómo reparar la válvula de riego?

Es común que en algún momento, observemos que la válvula de riego no cierra como debería, y eso se puede dar dependiendo de varios motivos. Uno de ellos puede ser que se haya instalado la válvula al revés. Si eso es lo que ocurrió, la solución es reinstalar la válvula nuevamente, con el sentido que corresponda. También puede suceder que el sello del aparato se haya trabado con una piedra pequeña. La solución para este inconveniente es que se corte el agua, y abramos la válvula de riego retirando con cuidado los seis pernos que tiene, luego sacamos el sello de goma, y retiramos el objeto que obstruya el funcionamiento. Controlando siempre que no se haya roto el aparato, a causa de la misma. Otra de los inconvenientes comunes, es que el embolo interior se quede pegado en la parte superior del solenoide.

Para esto, con el agua ya cortada se debe girar el solenoide hasta poder retirarlo por completo. Luego lo limpiamos y colocamos todo en su lugar. Que el orificio que está en la entrada de la cámara se tape es otro de los inconvenientes que nos pueden llegar a ocurrir en las válvulas de riego, si esto sucede, debemos (con el agua ya cortada) retirar el solenoide, haciéndolo girar, y verificar que salte un pequeño chorro de agua, y con la ayuda de un fino alambre, o de un alfiler, remover el orificio, hasta que se retire aquello que obstruía el paso. Y por último, otro de los inconvenientes que nos pueden suceder es que al embolo interior del solenoide se le gaste la gomita de la punta. Para esto, debemos retirar el solenoide con el agua siempre cortada, y verificar, y cambiar la goma. Si el inconveniente de la válvula de riego es que esta no abre, debemos comprobar primero que nada, que el programador se encuentre bueno. Para poder verificar esto debemos un solenoide, y conectar en el programador un cable del solenoide, y otro cable a la parte de la salida de la válvula de riego.

Debemos estar atentos siempre a que la válvula se encuentre conectada al programador, ya que es muy común, que por distracción, pasemos por alto ese pequeño detalle, y ese sea el inconveniente que nos está frenando el funcionamiento de nuestra válvula de riego. La válvula de riego a su vez, siempre se debe mantener limpia, para que su funcionamiento sea el correcto.