Caudal de riego por aspersion
Para poder analizar adecuadamente el caudal de riego por aspersión, primeramente vayamos a ver un poco acerca de lo que se trata el riego por aspersión. El riego por aspersión es automatizado, y comprende 35 toberas que son sectorizadas en 5 o más zonas, también posee un controlador, válvulas eléctricas y un sensor de lluvia para que sea automático. Para saber cual será el caudal de riego por aspersión se deben hacer ciertos cálculos. Existen muchísimos aspersores con una amplia gama de alcances y caudales.
El caudal de riego por aspersión se logra saber, cuando la cobertura de terreno que se va a regar, está bien hecha. Es decir, si se tiene un aspersor que llega a alcanzar unos 10 metros con una presión determinada, se debe efectuar la instalación de esta forma, se colocará un aspersor cada 9 metros en dirección longitudinal y un aspersor cada 11 metros en forma transversal.
Los riegos por aspersores en algunos lugares, son de 7 lts. por M2 y por día. Como dijimos antes hay muchos aspersores que poseen distintos alcances y caudales. Por ese motivo para hacer un cálculo correcto, de cual sería el caudal de riego por aspersión adecuado, es preciso saber algunos secretitos del aspersor, el cual es la cubrición que éste tenga, que debe ser la más uniforme que se pueda.
Lo común es que se puedan superponer entre un 10 a un 20 % en una dirección y que se superpongan a unos porcentajes más en dirección perpendicular. Y si un aspersor llega a alcanzar los 10 metros a determinada presión, el marco de plantación tendrá que ser de 9 x 10. Estas son unas buenas tácticas para saber cual sería el caudal de riego por aspersión que necesitamos saber. El riego por aspersión tiene buenos beneficios si se hace con un buen diseño, este es un sistema presurizado, es decir que puede regar a los cultivos en forma de lluvia artificial; y se puede controlar el caudal de riego por aspersión, por que permite dominar la fuerza de descarga y el tiempo en que el agua es utilizada. El riego por aspersión emplea emisores de agua que se llaman aspersores; es un riego que se hace como si se extendiera una sábana por que cubre el cien por ciento toda la superficie. Como ya se mencionó más arriba, los aspersores son fabricados en diferentes modelos, distintos diámetros de mojado, diferentes descargas y según las exigencias de presiones.
¿Cómo calcular y controlar el caudal de riego por aspersión?
Generalmente la forma de mojado que presenta es circular, y el agua sale del aspersor a través de unas boquillas, esa es otra manera de poder calcular o controlar bien el caudal de riego por aspersión. Al colocar un pluviómetro o un depósito para captar la lluvia, se puede evaluar la lámina de agua del aspersor; ésta lámina de agua empleada se mide en milímetros, o sea 1 mm. equivale a 1 litro por cada metro cuadrado, y a 10 M3 por hectárea.
Ahí tenemos otro caudal de riego por aspersión. Para poder alcanzar el diámetro de mojado que se haya elegido, y un determinado caudal de riego por aspersión, se debe lograr una mayor o menor igualdad de la lámina empleada, por la calidad del aspersor, para que pueda controlar la presión de la tarea que debe realizar. También se debe tener en cuenta, la uniformidad de la lluvia emitida por el sistema de riego, y que tipo de gota sale, además hay que ver el grado de superposición entre cada aspersor. Así de ese modo, al juntar todos los factores nombrados, se logra al fin una igualdad del caudal de riego por aspersión, en toda la superficie del terreno que se desee regar. En tiempos de verano o de temperaturas elevadas, en que la evapotranspiración es muy intensa, se debe regar más seguido y de manera uniforme, para lograr un césped bien verde y sano durante casi todo el año.
El sistema de caudal de riego por aspersión automático, le da al césped la posibilidad, de que pueda obtener la cantidad de agua justa que necesita, sin tanto derroche de energía eléctrica y agua. La diferencia que se obtiene gracias al caudal de riego por aspersión, se nota en la densidad y uniformidad que logra el césped, y el buen color verde sin zonas amarillentas o raleadas que hace la falta de agua necesaria. Y para ir finalizando este informe, vamos a hacer mención de cómo se puede montar un riego automático por aspersión. En primer lugar, se debe dibujar un plano del terreno o jardín donde se lo quiera colocar a este sistema de riego. El croquis se confecciona a partir de que se haya medido la parcela en cuestión. El plano se dibujará en un papel milimetrado; el diseño del riego de una superficie familiar, se hace comúnmente a una escala de 1.100, o sea, es un centímetro de la regla en el plano, eso corresponde a 1 metro en el terreno verdadero.
O sea, en el papel milimetrado es más fácil hacer el plano, pues lo que en el papel son 10 cm., en la parcela real corresponde a 10 mts., en una escala de 1.100.
En el plano es indispensable al dibujar, indicar las plantas que hay, (en el caso de que hubieran), situar bien el lugar donde estén los árboles, puesto que los troncos pueden estorbar o interrumpir al chorro de los aspersores, o si hay arbustos o una construcción o cualquier cosa que pudiera estorbar al paso del agua de riego. Además, se deberán indicar tuberías ya existentes, tanto sean de gas, de cables de algún farol, etc., para no tener que romperlas en el momento de hacer las zanjas para instalar las tuberías de riego. También se tendrán en cuenta la presión y el caudal de riego por aspersión, pues el agua que pasará a través de los aspersores, será la que sale del abastecimiento de la vivienda, colocando una ramificación para dicho riego, o también la provisión del agua podría ser de algún depósito o pozo proveídos por una bomba. Se tiene que determinar los datos del caudal del agua y la presión de la misma con que se dispone. Generalmente la presión con que cuentan las viviendas, suelen ser suficientes hasta para llegar a los aspersores, por lo tanto no habría problemas al respecto, si se trata de jardines o terrenos medianos o pequeños.