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Riego por pulsos
Para el uso y funcionamiento de la técnica de riego por pulsos, siempre se debe utilizar para su funcionamiento un efecto natural que hacen todos los tipos de suelos, algunos en medidas más grandes, y otros suelos en medidas menores, pero todos lo hacen. Este efecto natural del que estamos hablando, que es utilizado por el riego por pulsos es hacer que se disminuya lo más posible la capacidad de infiltración que posee un suelo en particular. Ya que una vez mojada la tierra, el agua comienza a retirarse lentamente, y luego se debe dejar descansar por un periodo corto de tiempo el mismo. Para que se pueda dar el efecto necesario para el riego por pulsos es necesario que intervengan muchas causas distintas, de distintos orígenes.
Pero si hacemos una lista resumida de lo que sucede, se debe lograr que toda el agua pueda comenzar a escurrirse a una velocidad más rápida de lo que solía, por una superficie que se encuentre mojada ya previamente, así se puede lograr que todos los caudales, que llegan al final de cada uno de los ciclos de avance puedan llegar a ser más sensibles a que si el sistema se diera por un flujo de agua continuo, sin detenimiento. Con esta técnica que se está utilizando cada vez más en los suelos para cultivo, llamada riego por pulsos, obtenemos muchas ventajas a favor para nuestros cultivos, y para el suelo especialmente. Principalmente, la ventaja del riego por pulsos es que se logra evitar casi por completo la erosión que se genera casi siempre, frecuentemente por todas las cantidades de riego seguido y continuo que se le da al suelo, lo que hace que se incremente en gran medida la eficacia de nuestro riego. En el riego por pulsos, una vez que termina por completo la fase de “etapa de avance”, se debe comenzar con la siguiente fase, a la que se la denomina como “etapa de remojo”.
El fin de la etapa de remojo, es lograr que se le dé a nuestro suelo toda la profundidad de infiltración que es necesaria para nosotros, dependiendo por completo del tipo de cultivo con el que estemos tratando, y dependiendo a su vez de la capacidad del campo. Con el uso y aplicación de todos estos ciclos nombrados anteriormente, se logra poder aplicar a nuestro terreno la lámina de agua que se desee. Al cabo de estas tareas, nos vamos a encontrar con un terreno, el cual va a estar dividido en dos partes iguales, una parte derecha, y otra parte izquierda. Y en el centro de nuestro lote se va a encontrar ubicada la válvula P & R, necesaria para el riego por pulsos.
Funcionamiento del riego por pulsos
También es indispensable en el riego por pulsos la presencia de un controlador. El equipo controlador va a ser el indicado de hacer todas las administraciones necesarias para nuestro terreno, como por ejemplo, administrar los tiempos, haciendo que se desvié el agua de un lado hacia el otro lado del terreno, según queramos. Los movimientos del agua se deberán hacer en tiempos específicos, los cuales son llamados “tiempos de avance de agua”, y así se podrán definir todos los ciclos de avance, sin complicaciones. Por ello es que el riego por pulsos se utiliza tanto en la industria agrícola. Para ser más claros con el riego por pulsos, daremos un ejemplo, si se decide que se va a trabajar en cuatro ciclos, la sucesión de los tiempos de avance va a ser: movimiento desde uno de los dados hacia la primera línea punteada. Luego se moverá, avanzando del otro de los lados, haciendo el avance hacia el mismo punto, la misma línea punteada.
Después, como segundo ciclo, se vuelve a mover sobre el primero de los lados, se escurre con mucha rapidez por encima de los surcos que se encuentran mojados previamente, y se vuelve a avanzar hasta la segunda línea punteada. Así, de esta manera, al cabo de muchos movimientos y avances, se logra terminar con todo el lote por completo. En el riego por pulsos, es muy usual que la infiltración se reduzca mucho especialmente en las zonas más húmedas del terreno, ya que el agua tiene a escurrirse con mucha más rapidez, comparado con las otras partes del territorio, ya que comienza a mojarse mas en aquellas zonas donde el suelo se encuentra más seco en comparación. En el riego por pulsos todo se da casi como si se tratara de unos surcos cortos, que se encuentran colocados cada uno a continuación del otro, sucesivamente, a lo largo del terreno. Logrando así que se dé el famoso avance del que estábamos hablando anteriormente, que caracteriza tanto al riego por pulsos. Este sistema está siendo bastante utilizado, pero la competencia de sistemas es mucha, y existen muchos que nos dan los mismos resultados, de una manera más sencilla y más rápida que el riego por pulsos.
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